¿Podrían los Warriors 2006-07 triunfar en el baloncesto moderno?

Cuando Jason Richardson declaró que su equipo de los Warriors 2006-07 sería “uno de los mejores” en la NBA actual, mi instinto como analista se activó. No era solo nostalgia: era un experimento mental fascinante.

Los pioneros del ‘small-ball’

Ese equipo, liderado por Baron Davis y entrenado por Don Nelson, jugaba un baloncesto que hoy consideraríamos moderno:

• Flexibilidad en las alineaciones: Usaba formaciones con cuatro bases y Andris Biedrins o Al Harrington como pivote.
• Ritmo y espacio: Segundo en ritmo (99.1) con 24.3 tiros de tres por partido (tercero en la liga).
• Defensa adaptable: Jugadores móviles como Stephen Jackson y Matt Barnes permitían cambios defensivos agresivos.

Las métricas actuales muestran que estaban 15 años adelantados. Su récord de 42-40 no reflejaba su innovación.

Proyección estadística para 2024

Usando datos históricos, simulo cómo rendirían hoy sus alineaciones clave:

Su mayor ventaja: versatilidad sin posiciones fijas. La alineación Davis/Richardson/Jackson/Ellis/Barnes sería un problema para los pivotes modernos.

Contrapuntos

Sin embargo, hay factores que matizan el optimismo:

1. Defensa limitada: Faltaba protección interior (53.8% de acierto rival en el aro, entre los peores).
2. Volumen ≠ eficacia en triples: Solo acertaban el 35.6% (promedio liga: 35.8%).
3. Rotación limitada: Los equipos actuales tienen bancas más profundas y polivalentes.

Conclusión: Buen equipo, pero no favorito

Mi modelo sugiere que serían un equipo peligroso (45-52 victorias), pero no favorito al título por sus debilidades defensivas. Aun así, su influencia en el juego moderno es innegable: fueron el prototipo del baloncesto actual.